En 1783 las trece colonias americanas consiguen su independencia de Gran Bretaña. Aún no saben si van a crear una nación, o trece. El resto del mundo, y los agricultores prefieren lo segundo. La idea de un estado fuerte es obra de los más conservadores.
Tres políticos de la época dieron un espaldarazo a la constitución desde un periódico que se llamaba "Los Federalistas", Firmaban Publius, pero sus nombres eran John Jay, James Madison y Alexander Hamilton. El texto es hoy un clásico.
Una vez redactada, la constitución fue aprobada por los estados uno a uno. El primero en hacerlo fue Delaware (1787). El último es Rhode Island (1790). Igual que en la Comunidad Europea, los estados pequeños tienen miedo de perder su poder al unirse a otros con población mucho mayor. Uno de los grandes éxitos de la unión fue el modo de extenderse hacia el oeste. En lugar de establecer colonias, crearon unos requisitos con los que las nuevas áreas pasaban a ser territorios y luego estados de pleno derecho. De este modo nunca hubo ciudadanos de primera y de segunda categoría.
Los conservadores querían un dólar fuerte para fortalecer el comercio, los demócratas uno débil para favorecer a las clases bajas endeudadas, por esa razón se opusieron a la creación de un banco central. Washington lo creo en 1791. Pero sus estatutos expiraban en 1811, bajo el gobierno de los demócratas que no lo renovaron.
Parece que fue ayer.
Isaak Asimov. El nacimiento de los Estados Unidos (1763-1816)